Los televisores inteligentes, que alguna vez fueron una opción de lujo, ahora son la oferta estándar. Cuando ingresa a una tienda de electrónica o compra en línea un televisor nuevo, casi todos los modelos que encuentre serán televisores inteligentes y tienen un precio asequible.
Y si bien tienen muchos beneficios, no debe comprar un televisor inteligente sin pensarlo primero. Veamos varias razones por las que no debería comprar un televisor inteligente.
¿Qué es un Smart TV?
Los televisores inteligentes son televisores que tienen la capacidad incorporada para conectarse a Internet. Esto significa que su televisor se conecta, en lugar de tener que usar un dispositivo conectado como una caja Roku o una consola de juegos para acceder a los servicios en línea.
Debido a que los televisores inteligentes están conectados a Internet, generalmente le permiten descargar aplicaciones como lo haría en su teléfono. La mayoría de las plataformas de televisión inteligente tienen aplicaciones para los principales servicios de transmisión como Netflix y YouTube, además de ofertas para las principales redes de televisión y más servicios especializados. También puede utilizarlos para navegar por la web y acceder a otros recursos en su red doméstica.
Tener su televisor en línea es definitivamente útil, y su precio asequible significa que no tiene que desembolsar más por estas funciones. Pero seguimos pensando que los televisores no inteligentes o dispositivos alternativos tienen un lugar digno en su hogar. Este es el por qué.
1. Los riesgos de privacidad y seguridad de Smart TV son reales
Cuando considere comprar cualquier producto «inteligente», que es cualquier dispositivo que tenga la capacidad de conectarse a Internet, la seguridad siempre debe ser una preocupación principal. Todos los dispositivos listos para Internet contribuyen a la Internet de las cosas, que posiblemente sea una de las peores pesadillas de seguridad de la actualidad.
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Resulta que los televisores inteligentes son uno de los peores infractores. Ponen en riesgo su privacidad y seguridad de varias formas; incluso el FBI ha emitido advertencias sobre los riesgos de los televisores inteligentes.
Casi todos los televisores inteligentes usan el reconocimiento automático de contenido (ACR) para rastrear lo que estás viendo. Usan esta información para mostrarte anuncios más relevantes. Si bien a menudo puede limitar la recopilación de estos datos, puede ser difícil encontrarlos o revertirlos. ¿De verdad quieres compartir todo lo que ves con el fabricante de tu televisor?
Otro problema de seguridad importante con los televisores inteligentes es la falta de actualizaciones. Cada plataforma individual depende de su proveedor para las actualizaciones de aplicaciones y sistemas operativos. Si tiene un televisor que ya no recibe actualizaciones, o tarda mucho en recibir parches de software, su televisor podría ser un punto vulnerable en su red.
Finalmente, algunos televisores inteligentes tienen cámaras integradas y la mayoría tiene un micrófono. Los actores malintencionados podrían aprovechar las vulnerabilidades de seguridad anteriores para espiarte a través de tu cámara web. Y no solo los piratas informáticos abusan de esto: en 2015, CNN informó que la política de privacidad de Samsung mencionaba la transmisión de sus conversaciones a un tercero.
Ya sea de un pirata informático o del fabricante de su televisor, hay una gran cantidad de datos para recopilar cuando solo desea ver algo en su televisor.
2. Otros dispositivos de TV son superiores
El principal atractivo de los televisores inteligentes es que puede acceder a Netflix, Hulu, Spotify y servicios similares directamente desde su televisor. Si bien esta idea es excelente, esos servicios no son exclusivos de los televisores inteligentes. Y, de hecho, puede obtener mucho más de dispositivos alternativos.
Opciones como Roku, Amazon Fire TV, Apple TV y Chromecast son plataformas mucho mejores. Ofrecen interfaces menos complicadas que son más fáciles de navegar que su televisor inteligente. Es probable que la selección de aplicaciones sea más fluida que la que ofrece la tienda de aplicaciones de su televisor inteligente. Y dependiendo de los ecosistemas que ya utilice, estas plataformas ofrecen una mayor comodidad e integración con su teléfono y otros dispositivos.
Por ejemplo, el Amazon Fire TV Stick tiene un control remoto habilitado para Alexa, lo que le permite lanzar sus programas favoritos sin buscar a tientas los menús. Si tiene muchos dispositivos Apple, el Apple TV facilita compartir medios desde su iPhone o iPad. Para la mayoría de las personas, estas ventajas son mucho mejores que sufrir lo que se incluye en su televisor inteligente.
En resumen, los decodificadores como el Apple TV y los dispositivos de transmisión como el Chromecast hacen todo lo que puede hacer su televisor inteligente, pero mejor. Son económicos y mucho más flexibles. Como puede agregarlos a cualquier televisor, su propio televisor sigue siendo una pantalla simple mientras el dispositivo maneja lo que está viendo.
Y aunque un televisor inteligente puede volverse obsoleto después de unos años, puede reemplazar fácilmente su dispositivo de transmisión o llevarlo a un televisor nuevo. Si necesitas ayuda para decidirte, echa un vistazo a nuestra comparación de Chromecast y Roku .
3. Los televisores inteligentes tienen interfaces ineficientes
La funcionalidad inteligente requiere una interfaz adecuada. Los teléfonos inteligentes y las computadoras son excelentes porque ambos admiten dos métodos de entrada importantes: escribir y señalar. Los televisores inteligentes son terribles en ambos y esto puede generar mucha frustración.
Cuando quiere sentarse y ver algo en un televisor inteligente, en realidad es mucho más trabajo de lo que espera. No es abrumador, pero hace que lo que debería ser una experiencia divertida sea inconveniente en el mejor de los casos.
Un ejemplo importante es cuando desea buscar un programa de televisión o una película en particular en un servicio de transmisión. Con un control remoto de TV normal, escribir es un asunto de tirones de cabello que podría requerir hasta una docena de pulsaciones de botones por letra escrita. Si bien la mayoría de los televisores inteligentes tienen soporte para micrófono, la solución estándar suele ser irregular.
Por otro lado, la mayoría de las cajas de transmisión vienen con controles remotos que tienen asistentes de voz superiores. Algunos de ellos también tienen aplicaciones de control remoto de TV móvil , que permiten escribir sus búsquedas en un teléfono inteligente o tableta.
Y ese es solo un problema. Muchos televisores inteligentes están plagados de interfaces generalmente deficientes que requieren muchas pulsaciones de botones para llegar a cualquier parte y esconden configuraciones importantes donde es posible que las pierda. Incluso el control remoto puede resultar confuso, ya que oculta algunas funciones detrás de colores o letras que no son del todo claras.
Si tiene un televisor inteligente más antiguo que ya no recibe actualizaciones, podría quedarse atrapado con estas malas interfaces durante mucho tiempo.
4. El rendimiento de Smart TV a menudo no es confiable
El uso de aplicaciones de televisión inteligente para ver contenido es conveniente, pero las aplicaciones casi siempre son inferiores a las que están disponibles en su teléfono o computadora. Además de los problemas de interfaz discutidos anteriormente, otro problema es que los televisores inteligentes no tienen tanta potencia de procesamiento como otros dispositivos.
Es común el bajo rendimiento y la negligencia por parte de los desarrolladores de aplicaciones. La mayoría de los usuarios de televisores inteligentes han experimentado un retraso en la entrada al presionar botones, se congelan y se bloquean cuando las aplicaciones intentan hacer algo intenso y otros problemas relacionados con el rendimiento. Esto te lleva a tener que matar aplicaciones y reiniciarlas, lo que nunca es divertido.
Los televisores inteligentes también tienen problemas técnicos. Por ejemplo, hemos visto un problema en el que la aplicación de YouTube en un televisor inteligente Samsung superponía los títulos de video con el elemento a continuación, lo que los hacía casi imposibles de leer. Tengo que volver a emparejar mis auriculares Bluetooth con mi televisor inteligente casi cada vez que lo uso. Y cuando desconecto un cable HDMI y lo vuelvo a conectar, el televisor olvida el nombre que configuré para esa entrada y me obliga a reemplazar su icono de acceso directo.
Incluso las aplicaciones mismas pueden tener características limitadas. Por ejemplo, la aplicación de YouTube para televisores no le permite cambiar la velocidad de reproducción, que está disponible tanto en computadoras de escritorio como en dispositivos móviles.
Estos problemas no son realmente una sorpresa. Los proveedores de contenido tienen que hacer malabarismos con la compatibilidad con muchos puntos de venta en estos días, incluidos reproductores web, aplicaciones para teléfonos inteligentes, aplicaciones para tabletas, dispositivos de terceros como Roku y Chromecast, y televisores inteligentes. Los televisores inteligentes, que se utilizan menos que los teléfonos inteligentes y las computadoras, reciben una prioridad menor.
Esto plantea otro problema potencial: la utilidad de su televisor inteligente está limitada por las aplicaciones que están disponibles para él. Si los proveedores de contenido dejan de actualizar sus aplicaciones de televisión inteligente por cualquier motivo, su televisor inteligente pierde una gran parte de lo que lo hace «inteligente».
En solo unos años a partir de ahora, su televisor inteligente podría terminar convirtiéndose en un televisor tonto sin que usted tenga la culpa. Si eso sucede, tendrá que confiar en decodificadores y otros métodos de transmisión de todos modos.
¿Debería comprar un televisor inteligente?
Los televisores inteligentes definitivamente tienen muchas ventajas, por lo que no necesariamente estamos tratando de disuadirlo de que compre uno. Sin embargo, es importante que sepa por qué los televisores inteligentes no siempre son todo lo que creen que son.
Los problemas de seguridad y privacidad son uno de los mayores inconvenientes, pero las interfaces torpes y los fallos también son obstáculos. Se podría argumentar que los televisores inteligentes han bajado de precio porque son una plataforma madura para la recopilación de datos.
Si, después de leer todo esto, aún desea comprar un televisor inteligente, hágalo. Es bastante difícil encontrar un televisor de calidad que no sea inteligente, así que, si lo desea, puede evitar conectar su televisor inteligente a Internet para mantenerlo «tonto». Siempre puede complementar el televisor con una caja de transmisión si decide conectarse en línea más tarde.
Afortunadamente, hay muchos televisores inteligentes en el mercado si decides elegir uno.
Crédito de la imagen: Andrey_Popov / Shutterstock
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